Gloria María Lescano, María del Pilar Riofrío y Andrea Ramos, graduadas de Historia y Gestión Cultural, nos cuentan su experiencia en la Gerencia de Cultura de la Municipalidad de Lima y cómo su trabajo abre el camino para los futuros gestores culturales.
Por Silvia Torres. 05 junio, 2013.Conviviendo con la historia
“Me encanta lo que hago. Después de cinco años de haber egresado siento que es un montón lo que se ha hecho, que el tiempo pasa muy rápido y que hay que aprovecharlo para seguir. Trabajar en la municipalidad es una oportunidad y una motivación permanente”.
El vínculo de María del Pilar Riofrío (izquierda) con la historia empezó en el seno familiar. Aún recuerda cuando de pequeña veía trabajar a su abuela en el Comité Pro Restauración de la Iglesia de Colán. En Piura, y ya como estudiante de la Universidad, realizó investigaciones sobre el Señor Cautivo de Ayabaca, sobre las iglesias de Colán y la Casona de Miguel Grau. No pasó mucho tiempo hasta que ejecutara un proyecto de bibliotecas comunales para el Banco Mundial con una asignación de 6000 dólares. Las simulaciones universitarias pasaron a ser una realidad.
Unas prácticas en la Dirección de Museos del INC le dieron el enfoque a su carrera orientándola a los museos. Luego de ascender al puesto de asistente, pudo enriquecer su formación sobre colecciones, conservación preventiva y manejo de museos. Con todo lo aprendido, llega después a la Municipalidad de Lima donde actualmente se desempeña como coordinadora de Museos y programas educativos.
Subiendo los escalones
“Cuando me inicié en la carrera me gustaba la historia y quería ser profesora. Mis compañeros juraban que me iba a dedicar a la investigación; de pronto, me enamoré más de la gestión cultural, me impactó ver cómo en los festivales podíamos generar un cambio en la gente”.
Andrea Ramos (centro) egresó en el 2011 e ingresó como practicante al Museo Huaca Pucllana. Trabajó en una universidad viendo actividades culturales internas y, posteriormente, en la Asociación Mario Testino (Mate) pudo laborar directamente con el público visitante.
Ingresó a trabajar, hace cuatro meses, como productora en el Área de Promoción Cultural de la Municipalidad; ahora es asistente del área y está más cerca del planeamiento, que es donde quiere desenvolverse. Su preocupación es que se cumplan los cronogramas, las fechas y todo lo necesario para que la movida cultural en Lima llegue a todos.
La cultura como recurso
“Aprendí la visión para trabajar dentro del sector cultural y cómo utilizar la cultura como recurso para mejorar y aportar al vivir de la ciudad”.
Gloria María Lescano (derecha) empezó como practicante en el Área de Comunicaciones del Instituto Nacional de Cultura y luego en la Municipalidad de San Borja. Actualmente es la jefa de Promoción Cultural y Ciudadanía en la Municipalidad de Lima y trabaja tres programas en simultáneo: el primero sobre cultura viva, que se encarga de las organizaciones culturales en los barrios de Lima; el segundo, la calendarización de las celebraciones en la ciudad; y el tercero, la coordinación con los artistas y ambulantes de la calle, para generar una buena oferta en la ciudad.
“Mi jefatura se encarga de aplicar programas que no trabajan con un ámbito cultural ni con un arte especifico, busca que todos estos recursos sean útiles para mejorar la calidad de vida de la ciudad y construir nuevas formas de pensar cómo la cultura se vincula con diferentes sectores del desarrollo humano”, nos cuenta.